Enemigo de las orquídeas
No todas las historias alrededor de las orquídeas florecen. Mientras unas manos las acarician y
luchan por conservarlas, otras las destruyen. Estas especies vegetales también están rodeadas de
enemigos; el mayor de ellos, la deforestación.
La tala indiscriminada de bosques nativos está destruyendo el hábitat de estas plantas, por lo que
muchas especies se han extinguido. Ejemplo de ello es la Cattleya Cuadricolor, que está
prácticamente desaparecida.
“La deforestación es el mayor enemigo de las orquídeas. Los bosques se han acabado y estas
plantas no encuentran el medio adecuado para desarrollarse. Por eso hay que hacer campañas
para conservarlas”, afirma el ingeniero Luis Valle.
Lo anterior es corroborado por Andrea Niessen, quien asegura que si no hubiera sido por
coleccionistas como su abuelo Erick Niessen, el primer hombre que se conoce en el país con este
hobby, muchas especies ya no existirían.
A esto se suma el comercio clandestino, ya que muchos campesinos arrancan las orquídeas de tajo
y maltratan las matas para venderlas a los extranjeros, a quienes les encantan.
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