CRISTIANISMO

Los hebreos, un pueblo monoteísta creyentes en su único Dios, Yavhé, vivían en Palestina cuando fue dominada por el Imperio Romano, en tiempos del emperador Octavio Augusto. En esos tiempos nació en Belén, Jesús de Nazaret, tal vez tres años antes del año 0 de la era cristiana. A la edad de 30 años, en el año 27 d.C., comenzó a predicar una nueva doctrina, muy sencilla para ser comprendida por los más humildes y desamparados. Su doctrina se basó en el Amor, la misericordia, la Paz, la posibilidad de salvación y de la vida eterna. Además Jesús proclamaba la igualdad entre los hombres, al ser hijos del mismo Dios. Jesús predicó por tres años, acompañado por doce hombres, conocidos como apóstoles. Los doctores de la ley judía no consideraban a Jesús como un Mesías, más bien lo veían como un peligro para su dogma.

Fue acusado y Poncio Pilatos, el procurador romano de Judea lo condenó a muerte.

A la muerte de Jesús, sus apósteles predicaron su doctrina que hoy la conocemos a través de los evangelios. Su prédica era, a lo largo del Imperio Romano, a todos los hombres, libres o esclavos, judíos o gentiles, por ello, fueron perseguidos, y en algunos casos crucificados y quemados. Los mensajes de igualdad y la creencia en un solo Dios, fueron considerados subversivos, por lo que los mismos emperadores decretaron su persecución y muerte. El emperador Constantino, en el año 313 d.C. promulgó el Edicto de Milán, que permite la libertad de cultos y el emperador Teodosio en el año 380 d.C. decretó al cristianismo como

religión oficial del Imperio Romano. A partir de ese momento la Iglesia y los cristianos comenzaron a participar en los asuntos públicos.

La Iglesia, estaba organizada jerárquicamente, en la cúspide está el sucesor de Pedro, que será reconocido como Papa o Sumo Pontífice. También estarán los Patriarcas de Alejandría, Antioquia, Constantinopla y Jerusalén y en las demás ciudades importantes del Imperio habrán Obispos., Diáconos, y Presbíteros. La base de la comunidad cristiana serán los fieles, quienes deben seguir la doctrina y los valores enseñados por Cristo, conocidos a través del legado de los apóstoles en el Nuevo Testamento.